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Cabrera: Mensaje de las piedras

6. Planetas habitados por el hombre de los tiempos remotos

6.1. EL MUNDO GLIPTOLÍTICO - [MAPAS ANTIGUAS DE LA TIERRA]

Fig. 59: Primer hemisferio
                terrestre de la constelación de continentes de antes
Fig. 59: Primer hemisferio terrestre de la constelación de continentes de antes

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Presentación de Michael Palomino (2012)


de: Javier Cabrera Darquea: El mensaje de las piedras grabadas de Ica; edición privada, quinta edición 1991; avenida Bolívar 170, plaza de Armas, Ica, Perú. tel. 231933 / 234363;


6. PLANETAS HABITADOS POR EL HOMBRE

6.1. EL MUNDO GLIPTOLÍTICO - [MAPAS ANTIGUAS DEL PLANETA TIERRA] (p.221-241)

[Piedra grabada con un planeta con continentes - con un continente que hoy no existe más]

Poseo una serie de dos Gliptolitos [piedras grabadas] cuyos grabados representan mares y relieves continentales de los hemisferios de un planeta. En cada Gliptolito se ha representado un hemisferio. Estos Gliptolitos tienen aproximadamente setenta centímetros de diámetro mayor cada uno, son de color negruzco y la modalidad del grabado es la del rayado profundo con rebajes.

Las representaciones evidencian observaciones hechas desde gran altura y que luego se han graficado en estos documentos pétreos para mostrar una peculiar formación de continentes, que no corresponde a la que actualmente tienen los continentes de nuestro planeta (Fig. 59 y 60).


Fig.
                                59: Primer hemisferio terrestre de la
                                constelación de continentes de antes
Fig. 59: Primer hemisferio terrestre de la constelación de continentes de antes (p.59)

Primer hemisferio terrestre: Piedra Grabada de Ica que revela la posición y la forma que tenían los continentes en uno de los hemisferios de A: América del Norte. C: América del Sur. B: el continente Mu. D: el continente de la Atlántida (p.222)

Fig. 60: Segundo
                                Hemisferio terrestre de la constelación
                                de continentes de antes (p.60)
Fig. 60: Segundo Hemisferio terrestre de la constelación de continentes de antes (p.60)

Segundo hemisferio terrestre: otra Piedra Grabada de Ica que revela la posición y la forma que tenían los continentes en el otro hemisferio de nuestro planeta, en aquel remoto pasado de la Humanidad Gliptolítica. G: el continente Lemuria. E': Oriente Medio. E'': Australia. F. África (p.223) [Lamentablemente no es posible para leer las letras en el mapa].


En la superficie del primer hemisferio se aprecian cuatro bloques y en la del segundo tres, todos los cuales sugieren superficies sólidas o continentales, a diferencia de las zonas que están entre los bloques y que obviamente representarían mares. Se puede estimar que las superficies continentales de ambos hemisferios cubre el 80% y los mares el 20% restante. Se entiende así que hay cuatro partes de tierra y una de agua.

no se observa símbolo (p.221) alguno que represente agua en fase sólida y, por lo tanto, no existen casquetes polares en estos hemisferios. Alrededor del conjunto de continentes y mares se advierte una gran faja de líneas onduladas. Si se considera la escasa cantidad de agua en relación con las superficies continentales, se entiende que se ha producido una intensa evaporación de los mares y que la faja de líneas onduladas no es más que la representación simbólica de la acumulación de vapor en la atmósfera. Si por otro lado se observan unos canales de líneas onduladas conectados a la atmósfera que se desplazan sobre los mares (2 en Figs. 59 y 60), se deduce que estos canales indican que la evaporación continúa (p.222) y que el vapor sigue ascendiendo a la atmósfera, en donde sigue acumulándose.

Dadas las dimensiones gigantescas con que ha sido graficada la capa de vapor acumulada en la atmósfera, no cabe duda que el planeta representado se encuentra atravesando una etapa de progresiva e intensa acumulación de energía calorífica. Como es obvio, una gigantesca capa de vapor supone una gigantesca concentración de energía en dicha capa de vapor. De acuerdo con lo que he encontrado (p.223) en el sistema de símbolos empleados en los mensajes gliptolíticos, la energía a que me acabo de referir se halla representada en este Gliptolito por las líneas onduladas que se observan en la atmósfera. Los canales ondulados que se conectan con la atmósfera y se desplazan sobre los mares, adquieren otro significado que viene as sumarse al que ya tienen: que parte de la energía concentrada en la atmósfera se está liberando hacia los continentes a través de estos canales. Finalmente, si se observa que las pirámides - símbolo de un sistema captador, acumulador y distribuidor de energía - tienen la base orientada hacia la atmósfera y los vértices hacia los continentes (3 en Figs. 59 y 60) se tiene la certeza de que están indicando que parte de la energía de la atmósfera está siendo captada en un complejo sistema tecnológico, para darle un uso determinado. Todo esto significa que el planeta representado por estos dos hemisferios se encuentra en condiciones críticas, por efecto de la progresiva acumulación de la energía calorífica ya mencionada. Estas condiciones críticas sugieren que se avecina un cataclismo.

Después de conocer la situación general del planeta graficado en estos Gliptolitos, descifraré los símbolos que aparecen en cada bloque de los dos hemisferios.


PRIMER HEMISFERIO

Bloque A. Este bloque (Fig. 61)


Fig.
                                61: América del Norte
Fig. 61: América del Norte (p.225)

Bloque A, América del Norte, detalle del primer hemisferio terrestre (p.225).

presenta un suelo dividido en quince compartimientos, entre los que se advierten dos con vegetación natural (representa por rayas paralelas) y uno con animales criados por el hombre (representados por pequeños rombos encerrados en un círculo); no hay señales de vida humana. Se ven pirámides, símbolo de utilización de energía en esta parte del continente; éstas aparecen entre dos centrales energéticas (representadas por estrellas) que están ubicadas en la parte media del bloque.

Bloque B. Este bloque (Fig. 62)


Fig.
                                62: el continente Mu
Fig. 62: el continente Mu (p.226)

Bloque B. Continente Mu, detalle del primer hemisferio terrestre (p.226).

está dividido en nueve compartimientos, la mayor parte de los cuales corresponde a zonas desérticas: hay dos compartimientos ocupados por vegetación natural (representa por rayas (p.224) paralelas trazadas en el suelo) y dos por animales criados por el hombre (representados por rombos encerrados en un círculo). Se destaca en este bloque la presencia de una figura antropomorfa (5 en Fig.62).

La ausencia de símbolos en su cabeza que revelen capacidad reflexiva propia y la presencia de rayas paralelas en el cuerpo, símbolo de la capacidad cognoscitiva entrega y comandada por otro, revelan que se trata de un robot;


Fig. sin número:
                                robot, primer plano (p.227)
Fig. sin número: robot, primer plano (p.227)

Robot, detalle del Bloque B, en el primer hemisferio terrestre (p.227).

su graficación en este bloque debe interpretarse como actividad intelectual realizada por un conjunto de robots. El suelo se halla atravesado longitudinalmente por un canal, símbolo de conducción de energía, que se está liberando de la atmósfera. Esta energía (p.225) liberada está siendo controlada permanentemente por los robots, como lo indica simbólicamente el contacto que hace la nariz del robot con el canal. Se observan pirámides, símbolo de utilización de energía en esta parte del continente; este símbolo se halla muy próximo a la zona controlada por los robots. es evidente que en todo este bloque existe una actitud de expectativa a cargo de los robots, respecto de la situación energética que se está produciendo en el planeta.

Bloque C. Se constata en este bloque (Fig. 63)


Fig.
                                63: bloque C, América del Sur, detalle
                                del primer hemisferio terrestre
Fig. 63: bloque C, América del Sur, detalle del primer hemisferio terrestre (p.229)


la presencia singular del Hombre Reflexivo y Científico (6 en Fig. 63),


Hombre Reflexivo y Científico
Fig. sin número: Hombre Reflexivo y Científico, primer plano (p.230)

Hombre Reflexivo y Científico, residente de la Megápolis. Detalle del Bloque C, en el primer hemisferio terrestre (p.230).


que ostenta en la cabeza el símbolo que expresa su poder reflexivo. La dimensión de esta figura significa una formidable concentración de hombres reflexivos y (p.226) científicos que viven en esta vasta región constituyendo la Megápolis (38)

(38) Uso el término "Megápolis" para referirme a las macroconcentraciones humanas de Hombres Reflexivos y Científicos. Entiendo que en la Megápolis vivían estos hombres en compañía de otros tipos de hombres a quienes se requería para diversas actividades dela vida en el planeta.

La Megápolis se encuentra representada en el bloque por el cuadrado que encierra a esta cabeza humana, aislándose así de los demás compartimientos del bloque. Rodeando la Megápolis existen extensas zonas de vegetación cultivada por el hombre (representada por rayas paralelas dentro de un cuadrado), lo que sugiere agricultura y enriquecimiento de oxígeno en el ambiente. No hay símbolos referentes a la vida animal. Se notan tres centrales energéticas (representadas por estrellas) alejadas de la Megápolis. El bloque está dividido en trece compartimientos y (p.227) posee como símbolo de que se está liberando energía de la atmósfera, un canal longitudinal, semejante al descrito en el Bloque B, con la singularidad de estar conectado a la red de canales que discurren por os mares de todo el hemisferio.

Bloque D. El territorio de este bloque (Fig.64)


Fig.
                                64: continente Atlántida
Fig. 64: continente Atlántida

Bloque D, continente de la Atlántida, detalle del primer hemisferio terrestre (p.231).


está dividido en diez compartimientos. Infortunadamente, los ubicados en la parte más periférica tienen borrada gran parte de sus símbolos. No obstante, se observa que es un territorio de abundante vegetación natural y cultivada, a juzgar por las zonas de rayas paralelas libres y las rayas paralelas encerradas en un cuadrilátero, respectivamente.

Asimismo, hay símbolos que revelan zonas pobladas de animales criados por el hombre, y específicamente se destaca la cabeza y cuello de un animal, el alticamellus (39).

(39) El alticamellus fue un mamífero que vivió, según la Paleontología, hace 13 millones de años en el período Terciario. Vendría a corresponder actualmente a los camellos del desierto, adaptados para subsistir a altas temperaturas, en condiciones muy restringidas de recursos hidrológicos. La presencia del alticamellus en esta piedra responde a la intención de graficar la situación termo-crítica que presentaba el planeta. La temperatura media se había incrementado hasta un límite en que la vida zoológica sólo era posible para especies acondicionadas biológicamente para subsistir a altas temperaturas.

Se distinguen con claridad dos centrales energéticas (representadas por estrellas), una de las cuales está muy cerca a una región montañosa que se comunica con dos canales que conducen energía liberada de la atmósfera. Como situación dominante se destaca la presencia de una figura antropomorfa (7 en Fig. 64).


Por la ausencia de símbolos en la cabeza, se deduce, que se trata de la representación simbólica de un humanoide (notharctus con mínimo rango reflexivo,


Fig.
                                sin número: El humanoide notharctus en
                                el mapa, primer plano
Fig. sin número: El humanoide notharctus en el mapa, primer plano (p.232)

Humanoide: notharctus ascendido al rango humano de mínimo poder reflexivo. Su rango lo limita a la realización de tareas manuales y técnicas muy simples. Detalle del Bloque D, en el primer hemisferio terrestre (p.232).


por lo que todavía no puede conocer que la finalidad de su existencia es incrementar y conservar el conocimiento). Por las dimensiones de esta figura antropomorfa, se deduce que se trata de un conjunto de humanoides (p.228).


SEGUNDO HEMISFERIO

Bloque E. Representa el más grande de todos los bloques. Su parte central está tan adelgazada que el bloque da la impresión de estar conformado por dos sub-bloques unidos por un puente, por lo que vamos a dividirlo en dos para su descripción: Sub-bloque E' y Sub-bloque E''.

Sub-bloque E'. Está formado por ocho compartimientos Fig. 65).


Fig.
                                65: el continente medio
Fig. 65: el continente medio (p.233)

Sub-bloque E'. Oriente Medio, detalle del segundo hemisferio terrestre (p.233).


En uno de ellos aparece graficada una casa (8 en Fig.65). Los rombos que se notan en la ventana son el símbolo de vida animal y las líneas paralelas y verticales del techo son el símbolo de códigos cognoscitivos que capacitan (p.229) para la actividad técnica. Todo esto quiere decir que la casa representa el lugar en donde los notharctus reciben el mínimo rango de capacidad reflexiva y son ascendidos a humanoides, lo que los pone en condiciones de poder realizar labores manuales y técnicas muy específicas. Se aprecia en este sub-bloque un sistema montañoso cercano a una central energética (representada por una estrella).

Se consignan dos grandes pirámides, símbolo de un complejo tecnológico de energía. Junto a la figura de la casa aparece un árbol entre dos pirámides, conjunto simbólico que expresa la existencia de plantaciones industriales, y asimismo se observa al alticamellus, ya visto en el bloque D, cuya figura completa significa - a diferencia del bloque en que aparece sólo la cabeza - crianza de estos animales.

El círculo lleno de rombos que aparece en uno de los compartimientos inferiores significa crianza de animales. Se trataría en todo este bloque de expresar una (p.230) intensa actividad humana encaminada hacia las industrias agropecuarias.

Sub-bloque E''. Se observa en este sub-bloque cinco compartimientos (Fig. 66),


Fig.
                                66: Australia
Fig. 66: Australia (p.234)

Sub-bloque E''. Australia, detalle del segundo hemisferio terrestre (p.234).


en uno de los cuales se destaca una figura antropomorfa (9 en Fig.66). Las rayas verticales y paralelas que lo cubren por debajo de la cabeza significa que ha adquirido el conocimiento tecnológico en mínimo grado, como corresponde a un humanoide (recuérdese las mismas rayas que aparecen en el techo de la casa en el Sub-bloque E'). Pero la presencia de dos hojas (p.231), entre las cuales se halla la figura antropomorfa - la primera de las cuales aparece sin nervadura -, expresa que este humanoide está siendo elevado a un mayor rango cognoscitivo de tipo tecnológico.


Hombre reflexivo y tecnólogo
Fig. sin número: Hombre tecnólogo (p.235)

Hombre Tecnólogo. Dejó de ser un humanoide al haber sido elevado a un mayor rango cognoscitivo de tipo tecnológico. Detalle del Sub-bloque E''. en el segundo hemisferio terrestre (p.235).


Se trata, por lo tanto, ya no de un humanoide sino de un tipo antropomorfo que está siendo conducido al nivel cognoscitivo inmediato superior (p.232) que no puede ser otro que el de un Hombre Tecnólogo, consciente por lo tanto de la finalidad de su existencia. Por otro lado, se infiere por la figura del ave la existencia de instalaciones de transporte aéreo. Y por los árboles y los rombos dentro de un círculo, la existencia de zonas destinadas a cultivos vegetales y a crianza de animales. Se observan dos fuentes hidrológicas (representadas por (p.233) pequeñas superficies delimitadas por una línea cerrada y sinuosa) y una central energética (representada por la figura de la estrella).

Bloque F. Consta este bloque de nueve compartimientos (Fig.67).


Fig.
                                67: África
Fig. 67: África (p.236)

Bloque F, África, detalle del segundo hemisferio terrestre (p.236).


En la parte superior del bloque se aprecian símbolos referentes a aparato de vuelo (el ave) para transporte de alimento animal, y un símbolo de transporte terrestre (el alticamellus, que se encuentra entre los árboles) para transportar productos vegetales. Asociados a estos símbolos se observan las figuras de dos hojas que representan elementos nutrientes para la vida del hombre. Se trata, pues, en esta parte superior del bloque, de un complejo simbólico que revela actividad de transporte de alimentos para el hombre. Se destaca en uno de los compartimientos una figura antropomorfa (10 en Fig. 67),


Fig.
                                sin número: Hombre reflexivo y
                                tecnólogo
Fig. sin número: Hombre reflexivo y tecnólogo (p.238) [Los dos círculos al lado derecho simbolizan un platillo volador].

Hombre Reflexivo y Tecnólogo. Cognoscitivamente, se encuentre por encima del simple tecnólogo. Está capacitado para múltiples labores de ingeniería. Detalle del Bloque F, en el segundo hemisferio terrestre (p.238).


que ofrece en la cabeza un elemento simbólico que indica (p.234) elevado rango cognoscitivo. Obsérvese que la figura de dos pirámides - símbolo del complejo tecnológico captador, acumulador y distribuidor de energía - aparece graficada sobre la figura antropomorfa. Esto, sumado a la actitud de manipulación de un instrumento por parte de la figura antropomorfa, debe entenderse como que este individuo se encuentra a cargo del control de una compleja actividad energética, control que supone en él una elevada capacidad reflexiva. Se trata, pues, de otro tipo de hombre por encima del simple Hombre Tecnólogo, es decir, es un Hombre Reflexivo y Tecnólogo.

Junto a las dos pirámides existe una cadena de pirámides de pequeñas dimensiones. Por encima de esta cadena aparece una estrella, símbolo de la (p.235) existencia de una central energética. Por debajo de la cadena de pirámides se distinguen dos círculos concéntricos, símbolo de espacionave (vehículo espacial). Su cercanía a la cadena de pirámides implica la presencia en la zona de un espaciopuerto (centro espacial). En el compartimiento que se observa por debajo del Hombre Reflexivo y (p.236) Tecnólogo, se ve el símbolo de vida vegetal controlada por el hombre (rayas paralelas encerradas en un círculo). Y todo el compartimiento que está por debajo del anterior, ofrece el símbolo de animales silvestres representados por rombos que ocupan todo el compartimiento). Dos nuevas pirámides de grandes dimensiones que tocan los dos últimos compartimientos mencionados, dan a entender el uso industrial de la agricultura y la ganadería.

Bloque G. Es el bloque más pequeño de todos (Fig. 68)


Fig.
                                68: el continente Lemuria
Fig. 68: el continente Lemuria (p.238)

Bloque G, el continente Lemuria, detalle del segundo hemisferio terrestre (p.238).


Consta de cuatro compartimientos, en uno de los cuales se observa la figura de un notharctus en estado natural (12 en Fig. 68),


Fig.
                                sin número: Notharctus
Fig. sin número: Notharctus (p.239)

Notharctus. El primate graficado en las Piedras Grabadas corresponde por su forma no al pequeño primate arborícola actual sino a un primate extinguido, el notharctus, que, según la Paleontología, vivió hasta hace 50 millones de años. En esta piedra aparece tocando con las manos una hoja llena de cuadrículas, símbolo de vida humana o energía cognoscitiva. Esta representación significa simbólicamente que va a ser elevado al rango humano, con lo cual dejará su naturaleza de primate. Detalle del Bloque G, en el segundo hemisferio terrestre (p.239).


es decir, sin poseer el mínimo de rango reflexivo. El notharctus toca con las manos la figura de una hoja llena de cuadrículas, símbolo en este caso de capacidad reflexiva, es decir, rango humano. Esto cabe interpretarlo como que se está acercando a la posesión de la energía cognoscitiva. El símbolo que aparece en el bloque contiguo y que consiste en dos círculos concéntricos (11 en Fig. 68) representa una espacionave, cuya trayectoria es la línea semicircular que la rodea parcialmente para luego adquirir una forma ondulada. Pienso que la espacionave está relacionada con el símbolo de capacidad reflexiva que toca con sus dedos el notharctus. Se trata de los hombres Gliptolíticos que llegaron del cosmos al planeta con el propósito de elevar al notharctus a un rango cognoscitivo de tipo humano.


Fig.
                                sin número: el símbolo para una
                                espacionave son dos círculos
                                concentricos
Fig. sin número: el símbolo para una espacionave son dos círculos concéntricos (p.240)

Espacionave representada simbólicamente por dos círculos concéntricos y cuya trayectoria es la línea semicircular  que la rodea parcialmente para luego adquirir una forma ondulada. En este compartimiento del Gliptolito esta figura es el símbolo de la llegada de los Hombres Gliptolíticos a la Tierra, con el propósito de elevar al notharctus a un rango cognoscitivo de tipo humano. Detalle del Bloque G, en el segundo hemisferio terrestre (p.240).


La figura de la casa que se observa en otro bloque contiguo (13 en Fig. 68), figura que tiene unas rayas paralelas que cabe interpretarlas como conocimiento en general, es un símbolo que también está relacionada con la energía cognoscitiva que se está acercando al notharctus. El hecho de que sea una casa sin puertas ni ventanas debe ser entendido como que los actos de la vida del notharctus serán distintos a partir del momento en que haya sido elevado al rango cognoscitivo que le otorguen los Hombres Gliptolíticos y que, en consecuencia, los nuevos actos de su vida estarán regidos por el conocimiento humano.

Así dejará para siempre su condición de primate. En el compartimiento superior aparecen dos grandes pirámides asociadas a un símbolo cuyo significado se ha visto cuando he tratado de la hoja (p.237) como símbolo de la vida. Se trata de una especie de árbol cuyas ramas están asociadas al eje central. Este símbolo significa, como se dijo oportunamente, un conjunto de hombres. Asociado ahora al símbolo de las pirámides que significa energía en general, señala en definitiva que se ha establecido el conocimiento humano en la planeta. El dibujo en forma de nube que aparece en el compartimiento del notharctus y por encima de él, lo entiendo como un símbolo que reitera que el conocimiento implantado en el cerebro del notharctus vino del cosmos.

Finalmente, el dibujo de la estrella que aparece en el compartimiento ubicado por debajo del notharctus y que como ya se sabe es el símbolo de central energética, vendría a significar que la energía cognoscitiva llegada del cosmos hallará su centro en este bloque continental del planeta (p.241)


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